Por segunda vez el América obtuvo la Copa Interamericana, sin dejar duda alguna. Era un hecho, el club festejó sus 75 años como digno Campeón, aunque la bronca que armó el entrenador de las Águilas, Carlos Miloc, pareció más entretenida que el partido decisivo. Eran de nuevo los dueños del continente, al imponerse en esta ocasión al Olimpia de Paraguay. El hombre de la noche y de los goles fue Toninho, quién con sus dos tantos, dio el triunfo por 2-1 (3-2 global) sobre los guaraníes, esto en el duelo donde se dio una bronca iniciada entre Carlos Miloc y Fermín Balbuena, jugador del Olimpia, que detuvo el encuentro 16 minutos. Cuando se reanudó el partido, el árbitro Ronald Gutiérrez se acordó de las tarjetas y enseguida echó al ‘Tanque’ y al americanista Cecilio de los Santos, y al blanquinegro Rogelio Delgado. Por su parte el Olimpia pretendió abandonar el terreno de juego, pero minutos después el balón se puso en juego, mismo que Miloc observaba desde el túnel de acceso, pues sabía que su equipo era el que tenía que hacer el gasto para quedarse con la Copa Interamericana. El América levantó por segunda vez el título del mejor del continente, aunque siempre se recordará la actuación de Miloc y la bronca.